Nuevas adjudicaciones de suministros de radios

Según han informado medios de Defensa, el Comando de Apoyo Logístico del Ejército junto con la Subdirección General de Adquisiciones de Armas y Material, ha llevado a cabo la adjudicación de contratos de suministro de radios a dos destacadas empresas: RFE y Aicox. La inversión total de estos contratos supera los 13 millones de euros, marcando un importante avance en la infraestructura de comunicaciones del Ejército.

El contrato otorgado a RFE tiene un valor de 1,8 millones de euros, y está destinado al suministro de equipos de radio táctica V/UHF. Por su parte, Aicox ha obtenido un contrato de mayor envergadura, con un valor de 11,4 millones de euros. Este contrato ha sido categorizado como "Adquisición Urgente" y se centra en la provisión de equipos de radio definidos por software (SDR) V/UHF, formando parte del Sistema de radio táctico conjunto (SCRT).  Cabe destacar que tanto RFE como Aicox son miembros de la Unión Temporal de Empresas (UTE) que el Ejército encomendó el año pasado para integrar nuevos equipos de Comunicaciones e Información (CIS) en una serie de estaciones.

 


Aquí puedes ver de nuevo el webinar 'Conflicto palestino-israelí: claves para entender su mayor escalada en 50 años’

El ataque terrorista perpetrado por las milicias de Hamás, que resultó en numerosas víctimas y daños significativos, ha llevado al primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, a declarar una guerra contra Hamás. Aunque existen precedentes de conflictos armados similares, la situación de guerra plantea diversas incertidumbres.

El Instituto de Seguridad y Cultura celebró un webinar con la presencia de Manuel Torres Soriano, catedrático de Ciencia Política de la Universidad Pablo de Olavide, y Guillermo Pulido, analista y editor de la Revista Ejércitos. Aquí resumimos las principales claves de la sesión:

1. Subestimación de la amenaza de Hamás: Israel se encontró desprevenido frente al reciente ataque, subestimando la amenaza que representa Hamás. La previamente efectiva estrategia de contención de la violencia ha dejado de funcionar, lo que plantea serias dudas acerca de la capacidad disuasoria de Israel. Los preparativos para esta operación terrorista comenzaron hace un año, indicando un grado de preparación y organización sin precedentes.

2. La lógica de Hamás: Frecuentemente, los grupos terroristas operan bajo una lógica interna distorsionada que puede llevar a decisiones que, desde una perspectiva externa, parecen contraproducentes. Esto genera incertidumbre acerca de los objetivos estratégicos que subyacen tras los ataques de Hamás.

3. Cambio de paradigma ante la existencia de Hamás: Cada vez más voces en Israel están empezando a considerar a Hamás como una amenaza con la que ya no se puede coexistir. La impresionante capacidad de movilización de Israel en respuesta a esta crisis subraya su firme determinación de abordar enérgicamente la amenaza de Hamás.

4. Implicaciones regionales: Existe una creciente sospecha de que Irán, en calidad de patrocinador de Hamás, podría haber estado al tanto de este ataque y haber coordinado su preparación. Esto agrava las consecuencias geoestratégicas y podría llevar a Israel a enfrentar un conflicto en tres frentes: Hamás, Hezbolá e Irán/Siria. Existe un temor palpable de que estas acciones militares sean solo el comienzo de un conflicto a mayor escala, lo que podría poner en entredicho la histórica superioridad militar de Israel y desencadenar complicaciones regionales de gran magnitud.

5. Incertidumbre en el horizonte: La situación actual genera incertidumbre acerca del futuro. Si la Operación Espadas de Hierro se prolonga en el tiempo, podría situar a los líderes israelíes en un escenario inédito para el que no se habían preparado previamente, lo que incluye la posibilidad de una escalada regional del conflicto. La habitual superioridad militar de Israel ha quedado en tela de juicio, y está por verse hasta qué punto se aventurarán las Fuerzas Armadas israelíes para imponerse sobre Hamás.

 


Impulsando la Industria de Defensa en España: Estrategia para la Seguridad Nacional

En la búsqueda constante de fortalecer la seguridad y defensa nacional, España ha trazado una hoja de ruta clara y determinante: la Estrategia Industrial de Defensa (EID 2023). Bajo la tutela de la Secretaría de Estado de Defensa, este documento tiene el objetivo de guiar las decisiones y acciones en el ámbito de la defensa, estableciendo criterios y directrices para la priorización de capacidades industriales estratégicas y para la estructura de los programas de defensa. La EID 2023 no solo asegura la certidumbre y visibilidad de la Base Industrial y Tecnológica de Defensa (BITD), sino que también busca consolidar la posición de España en el mercado internacional y fomentar la cooperación internacional.

El contexto internacional, marcado por cambios geopolíticos y la necesidad de reforzar la producción de capacidades de defensa, ha impulsado un aumento gradual de la inversión en este ámbito. España, en sintonía con sus compromisos en la OTAN, tiene como objetivo alcanzar el 2% del PIB en inversión en defensa para el año 2029.

Los principios fundamentales de la EID 2023 son tres:

  1. Aumentar la autonomía estratégica en industria de defensa: España busca reducir su dependencia de terceros, especialmente en lo relacionado con las Capacidades Industriales Estratégicas de la Defensa (CIED). La apuesta por el multilateralismo y la autonomía estratégica se conjuga con la intención de mantener una economía abierta.
  2. Consolidar una base industrial y tecnológica de defensa competitiva y sostenible: La BITD es el pilar fundamental para proporcionar a las Fuerzas Armadas los medios más adecuados en equipamiento y capacidades de sostenimiento. Además, fortalecer su posición en el mercado internacional es clave para alcanzar la competitividad necesaria.
  3. Establecer un horizonte temporal de ocho Años: La EID 2023 se alinea con la Estrategia de Política Industrial para España 2030, el Marco Financiero Plurianual de la UE (2021-2027) y el compromiso de gasto alcanzado con la OTAN para 2029.

Para abordar estos desafíos y cumplir con los objetivos establecidos en la EID 2023, se proponen diez ejes estratégicos que marcarán el rumbo hacia una industria de defensa más robusta y competitiva:

  1. Priorización de capacidades industriales estratégicas (CIED).
  2. Programas de obtención de armamento y material. 
  3. Programas transversales de desarrollo de capacidades.
  4. Promoción de alianzas estratégicas.
  5. Cohesión y distribución territorial. 
  6. Cohesión y distribución territorial. 
  7. Atracción de talento y cultura de defensa. 
  8. Coordinación interministerial. 
  9. Cooperación internacional y apoyo exterior. 
  10. Gestión del conocimiento industrial y diálogo con el sector. 

Estos ejes estratégicos se apoyarán en acciones específicas que se detallarán en una guía de implementación de la EID 2023, permitiendo medir el grado de cumplimiento de los objetivos y realizar ajustes periódicos para adaptarse a las necesidades cambiantes del sector.

 

La industria de defensa en España presenta características únicas, como su estrecha relación con la soberanía nacional, la fuerte regulación e intervención estatal, la complejidad técnica de los proyectos y la jerarquización internacional de la BITD. Sin embargo, también se enfrenta a desafíos, como la brecha tecnológico-industrial en comparación con otras regiones del mundo y las diversas políticas y legislaciones en materia de exportación de armas entre los Estados miembros de la UE. Aunque los países de la UE se encuentran en el tercer lugar a nivel global en gasto en defensa, después de Estados Unidos y China, aún existe una dependencia tecnológica en áreas específicas debido a la fragmentación de esfuerzos inversores entre los Estados miembros. Para abordar esta cuestión, la EID 2023 propone una cooperación más estrecha y una distribución equitativa de proyectos para aprovechar sinergias y desarrollar tecnologías críticas de manera conjunta.

La estructura de la Base Industrial y Tecnológica de Defensa (BITD) en Europa es piramidal, con un reducido número de grandes empresas como contratistas principales, integrando el resto del sector. Con más de 2,000 empresas de menor tamaño que suministran subsistemas o componentes a los contratistas principales, el sector se está internacionalizando cada vez más. Sin embargo, esto también plantea desafíos en términos de políticas y legislaciones diversas en materia de exportación de armas y tendencias proteccionistas que pueden limitar las oportunidades en el mercado internacional.

España ha tomado medidas para reducir sus dependencias de terceros y desarrollar capacidades propias gracias a una política industrial activa del MINISDEF. Este enfoque ha permitido a las empresas nacionales liderar consorcios europeos y ser competitivas en el mercado internacional. Sin embargo, en comparación con otros líderes europeos, la BITD nacional muestra un tamaño menor y una fragmentación que supone una barrera para el crecimiento y la competitividad.

La EID 2023 juega un papel fundamental para potenciar el tejido industrial nacional en el sector de defensa y reactivar la actividad del mismo. Contribuirá al desarrollo de capacidades industriales propias y a la consolidación de la posición de España como un actor relevante en la seguridad y defensa a nivel global. Además, esta estrategia se alinea con los compromisos de la OTAN y la Unión Europea, buscando contribuir a la creación de una Europa más segura y autónoma en términos de defensa.

Sin embargo, para que la EID 2023 sea exitosa, es fundamental el compromiso y colaboración de todos los actores involucrados, tanto el sector público como el privado. Es necesario establecer una visión compartida y trabajar en conjunto para superar los desafíos y alcanzar los objetivos propuestos.

El desarrollo de capacidades industriales propias, la promoción de la investigación y desarrollo tecnológico, así como la atracción y retención de talento, serán pilares fundamentales para alcanzar el éxito de esta estrategia.

La implementación de la EID 2023 será un camino desafiante, pero con el compromiso y trabajo conjunto de todos los actores involucrados, España estará preparada para enfrentar los desafíos del futuro y consolidarse como un actor relevante en la seguridad y defensa a nivel internacional.


Manuel Torres Soriano, miembro del Consejo Académico del Instituto de Seguridad y Cultura, en Vozpópuli

El desafortunado incidente en Francia que resultó en la muerte de Nahel, un joven de 17 años, a manos de un agente de policía, ha desencadenado una serie de violentas revueltas en todo el país. Estos disturbios reflejan un problema más profundo: la integración de la inmigración en Francia, que no tiene una solución fácil.

Ante este contexto, el diario Vozpópuli ha entrevista al miembro del Consejo Académico del Instituto de Seguridad y Cultura y catedrático de Ciencia Política en la Universidad Pablo de Olavide, Manuel Torres Soriano, que ha afirmado que en España aún puede evitar una situación similar si se toman las medidas adecuadas y se evitan los errores políticos cometidos por los franceses.

Torres Soriano ha destacado dos diferencias principales entre España y Francia que actualmente hacen improbable una situación tan extrema en nuestro país. En primer lugar, la dispersión territorial de los inmigrantes en España es considerable. A diferencia de Francia, donde los inmigrantes viven en guetos cerrados, en España están dispersos por todo el territorio y se integran en diferentes comunidades y culturas. Aunque existen algunos barrios con una alta concentración de población inmigrante, como Lavapiés en Madrid o el Raval en Barcelona, en general, los inmigrantes en España están interrelacionados y se integran más en la sociedad.

La segunda diferencia es el arraigo de los inmigrantes. En España, la mayoría de los inmigrantes son de primera o segunda generación, lo que significa que aún tienen vínculos con su país de origen. En cambio, en Francia, muchos inmigrantes son de cuarta o quinta generación y no tienen un arraigo claro ni en el país de sus antepasados ni en el país donde nacieron. Esta falta de arraigo puede generar un sentimiento de alienación y exclusión que contribuye a la segregación social.

A pesar de estas diferencias, Torres Soriano ha advertido de que es importante tomar medidas para evitar futuros problemas en España. Así, ha destacado la importancia de una acogida social adecuada para los inmigrantes, permitiéndoles sentirse parte del país y tratándolos como ciudadanos. Asimismo, es crucial evitar la concentración de inmigrantes en las periferias de las ciudades para evitar su aislamiento, fomentando su integración en el centro y facilitando su contacto con el ocio y el turismo.

En cuanto al control de fronteras, Torres Soriano considera que es necesario, pero enfatiza que no se debe recurrir a un cierre drástico. Es fundamental encontrar un equilibrio entre el control migratorio y la apertura hacia aquellos que buscan un futuro mejor.

El catedrático también ha advertido sobre la importancia de evitar los círculos de miseria en los que los inmigrantes a menudo se ven obligados a vivir. Estos círculos crean sociedades aisladas y empobrecidas que perpetúan la negatividad, el crimen y la miseria, lo que a su vez lleva al rechazo del propio país de acogida.

Si se abordan estos desafíos de manera efectiva, España puede evitar los errores cometidos por Francia y construir una sociedad más inclusiva y cohesionada.

Puedes leer la entrevista completa aquí.