¿Son compatibles Islam y Democracia? Una pregunta compleja que se puso encima de la mesa el pasado 9 de octubre en Córdoba durante la presentación del libro ‘Democracia e Islam, ¿una relación imposible?’, en la que participaron Carlos Echeverría y Manuel R. Torres Soriano, coordinador y coautor de la obra, respectivamente.

Sin embargo, «no existe un único Islam», en palabras de Torres Soriano, «algo que -advirtió este profesor de la Universidad Pablo de Olavide que además asesora a Europol en materia de terrorismo y propaganda- supone la primera dificultad a la hora de contestar a una pregunta así».

En cualquier caso, «cuando se pretenden priorizar principios fundamentales del Islam, los valores de la Democracia y del Pluralismo sí encuentran importantes obstáculos para asentarse», según manifestó a su vez Echeverría, profesor de Relaciones Internacionales de la UNED y subdirector del Instituto Universitario General Gutiérrez Mellado del mismo centro.

Echeverría recordó que «afortunadamente hay musulmanes que no priorizan tal objetivo, pero también hay estados que se consideran faros iluminadores del Islam y que, siendo coherentes con tales principios fundamentales, aplican políticas antidemocráticas en sus acciones, tanto interiores como exteriores».

De hecho, uno de los capítulos del libro está dedicado precisamente a esos «faros iluminadores del Islam» –Arabia Saudí, Qatar, Turquía, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait e Irán– cuyo «peso estratégico», junto a «sus políticas y esfuerzos dinamizadores, llevan a alejar aún más Democracia e Islam», de acuerdo con Echeverría. «Dada la enorme influencia que tienen hoy y van a seguir teniendo en los próximos años», incidió el coordinador del libro, «la influencia de estados como Qatar en Europa debería de preocuparnos».

En otras palabras: «La multiplicidad de interpretaciones de ese tronco común de creencias que supone el Islam explica que podamos encontrar corrientes que, como el salafismo, son directamente incompatibles con la democracia», según recalgó Torres durante la presentación. Y ahí es donde se encuentra «el verdadero reto», de acuerdo con el profesor sevillano pues, «más allá del problema inmediato de seguridad que supone el terrorismo yihadista, la extensión del salafismo en Europa implica un problema de mayor calado».

Manuel Torres quiso además advertir sobre «la capacidad del salafismo para fracturar la sociedad y generar problemas de convivencia de difícil solución». Algo en lo que también incidió Echeverría, para quien «la expansión de una religión no representa en sí un problema», todo lo contrario que la propagación «de lo que consideran valores fundamentales del Islam» determinados actores estatales y no estatales.

Democracia e Islam, ¿una relación imposible?, coeditado por el Instituto de Seguridad y Cultura junto a Editorial Comares, es una obra colectiva en la que el propio Echeverría junto a Manuel R. Torres Soriano, Javier Gil Pérez, Enrique Ávila Pérez y Beatriz Yubero Parro analizan en cinco capítulos los fundamentos sociológicos del islamismo a partir de una visión histórica, la acción de los principales actores en la difusión del islamismo a nivel internacional, el activismo yihadista y su ideología y, finalmente, la mujer y el Islam.