El monopolio argelino de hidrocarburos, Sonatrach, en sociedad con la italiana Eni, ha anunciado el descubrimiento de un importante pozo de gas y de petróleo en el perímetro de Zemlet El Arbi, Berkine Basin, al sureste de Argelia. Este anuncio de principios de semana coincide con la crisis diplomática abierta entre España y el país del Magreb ante la nueva postura del Gobierno hacia el Sáhara Occidental. Además, ante la escalada de precios energéticos, Argelia quiere aprovechar al máximo sus conexiones trasfronterizas para garantizar el suministro hacia Europa.

El 17 de febrero del 2022, el ministro de Energía y Minas argelino acordó con Níger y Nigeria desarrollar una hoja de ruta para acelerar el proyecto del gaseoducto transahariano (un gaseoducto de más de 4000 kilómetros para transportar billones de metros cúbicos desde Nigeria hacia Europa por Argelia). Argelia suministra gas a través del gaseoducto TransMed (de 2000 kilómetros, conecta el país del Magreb con Sicilia vía Túnez y con una capacidad de 32 bcm frente a los 8bcm del Medgaz, que une con Almería) y, además, se ha convertido en el segundo mayor exportador de gas hacia Italia después de Rusia.

El pasado noviembre, el Gobierno italiano hizo un guiño a la política exterior de Argelia en la región (que ha logrado aumentar en más de 10.000 millones de metros cúbicos la exportación de gas de Argelia). Por otro lado, con el nuevo descubrimiento de gas y petróleo en Berkine Basin, el presidente de la sociedad Eni, Claudio Descalzi, traslada su confianza al suministro energético de Argelia desde el TransMed. Descalzi ha asegurado que Italia disputará con España la entrada de suministro de gas africano hacia Europa, ante la necesidad europea de diversificar las conexiones del continente.

El ejecutivo español estableció el plan estratégico de contar con mayor número de proveedores de gas, tras el anuncio de que Estados Unidos se convertirá en uno de los mayores exportadores de gas licuado del mundo (con la producción de 60 millones de toneladas al año), y siendo España el país con mayor capacidad de regasificación de Europa. No obstante, si no se consigue la financiación para el Midcat, España e Italia van a entrar en competición directa para la entrada de redes energéticas desde el sur hacia Europa. Numerosas empresas españolas cuentan con grandes inversiones en el país del Magreb (Naturgy, Repsol, Acciona…), siendo Naturgy la que más compra gas a Sonatrach, pero que ahora se enfrenta a una subida de precios hasta el 2024 como mínimo.