La Comisión Europea presenta el nuevo Fondo Europeo de Defensa para dejar de depender de Estados Unidos

Bruselas quiere tender hacia una autonomía estratégica militar que mejore la capacidad de la Unión Europea en materia de Defensa al margen de la OTAN. En este sentido, la Comisión Europea ha diseñado de tres planes diferentes, cohesionados en torno al nuevo Fondo Europeo de Defensa previsto para el período presupuestario 2021-2027, con los que pretende elevar la inversión en equipamiento, investigación y movilidad militar para dejar de depender de Estados Unidos.

Actualmente, la Defensa de los Estados miembros está subordinada a la industria estadounidense, que presta asistencia y vende equipos al bloque comunitario. Uno de los objetivos clave de este conjunto de medidas es revertir esa situación: que la UE invierta el gasto en equipamiento militar en sí misma. Así, la Comisión sólo financiará proyectos en los que participen, al menos, empresas de tres Estados miembros. La CE sí contempla alguna excepción, como la financiación a filiales europeas siempre y cuando no haya transferencia de información clasificada entre ambos lados del Atlántico. En último término, la Comisión también busca fomentar y fortalecer la cooperación entre los Estados miembros.

Los 13.000 millones de euros previstos para el período 2021-2027 multiplican de forma exponencial los 600 fijados para el bienio 2018-2020. El presupuesto, que supone un desembolso de 1.800 millones de euros anuales, se desgrana en dos apartados principales: proyectos de investigación (a cuyo fondo se dedicarán 4.100 millones) y desarrollo de capacidades de Defensa, como drones o programas de ciberseguridad, (a los que se destinan los 8.900 millones restantes).

Ese crecimiento presupuestario también se traduce en mayores exigencias por parte de la Comisión, que aportará el 20% de aquellas iniciativas que se ajusten a las prioridades de la UE, con la participación de pequeñas y medianas empresas. Dicho porcentaje puede ascender hasta el 30% si el proyecto está alineado con las líneas básicas del PESCO. El resto del coste deberá ser abonado por aquellos Estados miembros interesados en producir esos planes y/o adquirirlos.

Junto al plan para la industria europea de Defensa, el Fondo también plantea la creación del Instrumento Europeo de la Paz, institución a través de la cual financiar actividades militares en terceros países. Para el período 2021-2027, este Instrumento estará dotado con 10.500 millones de euros.

La tercera pata del Fondo Europeo de Defensa se relaciona con la movilidad militar, para la cual Bruselas ha reservado 6.500 millones con los que facilitar el transporte de vehículos y personal militar en la Unión. Esta partida pretende adecuar infraestructuras civiles para los desplazamientos militares; por ejemplo, que un tanque pueda utilizar un puente.


La Comisión Europea prepara una reforma para que la Policía acceda a datos de usuarios de internet

La Comisión Europea prepara una propuesta normativa que modificará el limbo que supone en muchas ocasiones internet  en relación con la comisión de delitos y el acceso a la información por parte de cuerpos policiales.

En concreto, según hizo público Euractiv e informó Derecho en la Red, el próximo 17 de abril presentará una propuesta de reforma dirigida a que la policía pueda acceder a evidencias digitales de redes sociales, servicios de almacenamiento en la nube y otros servicios, incluidas plataformas comerciales.

La intención de la Comisión, que promoverá un nuevo reglamento y una directiva, es que los proveedores de comunicación estén obligados a responder rápidamente a las solicitudes de datos.

La nueva normativa pretende establecer un plazo máximo de 10 días que se reduce a seis horas si existiera una "amenaza inminente para la vida o la integridad física de una persona o de una infraestructura crítica". Al tiempo, la directiva obligará a cualquier empresa que preste servicios de recogida de pruebas electrónicas en la UE a designar a  un representante legal ante la Unión.

La propuesta de la Comisión se contextualiza en el "aumento exponencial del uso de servicios y aplicaciones en línea" que puedan utilizarse para cometer delito. La nueva normativa se aplicará, entre otros, a "redes sociales como Twitter y Facebook", servicios de cloud computing, registros y registradores de nombres de dominio y aquellos "mercados digitales que permiten a los consumidores y/o comerciantes realizara transacciones peer-to-peer".

Como consecuencia, aquellas empresas que actualmente no tienen oficinas o no almacenan los datos de usuarios en territorio europeo pero sí tienen habilitados sus servicios en la UE deberán atender a las demandas de la policía. Es decir, que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado podrán exigir datos a cualquier empresa de mensajería, aplicación o servicio de comunicación digitales que ofrezca sus servicios en territorio de la Unión.

La propuesta de la Comisión establece que esta nueva normativa se aplique en caso de delitos graves como "la pertenencia a una organización delictiva, la financiación de grupos terroristas", el entrenamiento para la comisión de actos terroristas o el apoyo a una organización delictiva.