Un experto advierte sobre el peligro de que Arabia Saudí y Qatar formen imanes en España

"Países como Arabia Saudí y Qatar expanden el wahabismo por el mundo mediante acciones como la financiación de mezquitas donde se imparte dicho postulado o la formación de imanes con dicha visión religiosa". Algo que ocurre también en Europa y en España, según advirtió el pasado 26 de abril en Córdoba Javier Gil, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad Pontificia Comillas ICAI-ICADE.

Este experto, que ofreció la conferencia ‘La doctrina yihadista: de España a Indonesia’ organizada por el Instituto de Seguridad y Cultura, señaló que esta actividad proselitista es muy activa y está mucho más presente de lo que podemos imaginar. "Sirva de ejemplo la expulsión hace un mes del imán marroquí de la mezquita de Corella (Navarra) por difundir la ideología salafi wahabista; es decir, por predicar el odio", argumentó, "o la de la semana pasada en Logroño del imán Alaa Mohamed Said, Presidente de la Unión Islámica de Imanes y Guías de España, por el mismo motivo: la difusión de la doctrina wahabista; es decir, puro odio".

En este sentido, puso de relieve que "una de las principales batallas que se presenta para luchar contra la expansión del extremismo violento es la financiación". "No en vano, el poderío económico de estos países ha sido clave para el éxito de esta actividad proselitista", explicó.

En concreto, "Arabia Saudí ha tenido un papel primordial en la expansión del wahabismo", algo que ha hecho por todo el mundo, desde países tan alejados como Senegal e Indonesia hasta Egipto, sin dejar de lado otros como Bélgica o España.

Tras explicar los orígenes del wahabismo, el profesor Gil ha puesto como ejemplo el caso de Indonesia, "el país con mayor número de musulmanes del mundo" y, precisamente por ello, "uno de los principales objetivos del wahabismo".

Según este experto, la campaña financiada desde Arabia Saudí para influir doctrinalmente en Indonesia desde los años 80 guarda una relación directa "no sólo con la ola terrorista que empieza en la década de los 90, sino también con la creciente ola de intolerancia que se está dando en el país contra otras minorías religiosas". Una influencia que está haciendo que "cada vez mayor parte de la comunidad musulmana indonesia desee convertir a su país en un Estado islámico siguiendo el modelo saudí".


Conferencia de Javier Gil: 'La doctrina yihadista, de España a Indonesia'

El Instituto de Seguridad y Cultura organiza la conferencia ‘La doctrina yihadista, de España a Indonesia’, que ofrecerá Javier Gil, Profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad Pontificia Comillas ICAI-ICADE, el jueves 26 de abril en Córdoba.

El evento tendrá lugar en el TRYP Córdoba Hotel, situado en la Avenida de Medina Azahara, 7, a las 19:00 horas. El ponente analizará el origen de la doctrina religiosa que alimenta el yihadismo desde países como Arabia Saudí y Qatar, su expansión por Europa y España mediante la financiación y control de mezquitas y otras formas de proselitismo apoyadas en el poder económico, algo que han hecho con especial eficiencia en Asia. Por ello, describirá el caso de Indonesia, donde estas doctrinas han penetrado hasta los mismos pilares del  Estado.

Para asistir al acto, que se enmarca en el programa Democracia, Radicalismo y Sociedad Civil, es necesario inscribirse rellenando este formulario o enviando un correo electrónico a info[at]seguridadycultura.org.


Un centro de rehabilitación de cinco estrellas para yihadistas en Arabia Saudí

Un condenado por yihadismo cumple su pena y, antes de obtener la libertad, ingresa en un centro de rehabilitación. Hasta aquí todo normal, si no fuera por las características de dicho centro: piscina, televisores, jardines, acceso a internet, personal vestido con libreas, habitaciones para las visitas conyugales, gimnasio con todo tipo de maquinaria, una clínica... Un centro de lujo para desradicalizar yihadistas. ¿Dónde? En Riad (Arabia Saudí).

France Presse visitó el Centro de Asesoramiento y Orientación Mohamed bin Nayef, en el que un grupo de clérigos y psicólogos intentan que los islamistas condenados por delitos de sangre abandonen su radicalismo mediante el convencimiento y no la coerción. "Buscamos la forma de que los beneficiarios tengan la sensación de que son gente normal y de que todavía tienen una oportunidad de reinsertarse en la sociedad", explica Yahya Abu Maghayed, director citado centro.

Los islamistas, que no son considerados presos ni detenidos, visten de blanco y tienen libertad de movimientos para disfrutar de los jardines bien cuidados, la piscina, el gimnasio, las televisiones...  Por dicho centro han pasado desde que abriera sus puertas en 2004 más de 3.300 yihadistas, entre ellos miembros de Al Qaeda, prisioneros de Guantánamo y talibanes.

Los gestores del centro presumen de una tasa de rehabilitación del 86% y de que la permanencia no es gratuita: si a los tres meses el interno no ha dado signos de mejoría, vuelve a quedar bajo tutela judicial. ¿Y cómo lo evalúan? Entre otras, mediante el uso del arte como terapia. Los internos pintan obras y los expertos buscan evolución en ellas.


Coronel Emilio Sánchez de Rojas: "Las repercusiones en Occidente de lo que ocurre en Qatar son más fuertes de lo que parece"

El mundo musulmán es enorme, abarca desde Mauritania y Senegal hasta Indonesia y Filipinas. Sin embargo, aunque desde el punto de vista identitario religioso existen unas pautas comunes, “la llamada región MENA –entre Oriente Medio y el Norte de África- es la que compone el núcleo duro” y, desde luego, “la más influyente” tanto en el conjunto de ese mundo musulmán como en Occidente.

Así lo puso de manifiesto este jueves en Córdoba el Coronel Emilio Sánchez de Rojas, Analista principal del Instituto Español de Estudios Estratégicos (IEEE) del Ministerio de Defensa, durante la conferencia ‘Claves geoestratégicas para entender el mundo musulmán’, que impartió en el TRYP Hotel Córdoba.

Sánchez de Rojas, que ha ocupado la Agregaduría Militar en la embajadas de España en Amán y El Cairo, insistió en que “los desequilibrios y las luchas de poder” que azotan el ámbito de la península arábiga “añaden más tensión a la zona, pero también a todo Occidente” pues, en su opinión, “las repercusiones de lo que ocurre con Qatar son más fuertes de lo que parece”.

El conflicto entre Arabia Saudí y Qatar es, en palabras del Coronel Emilio Sánchez de Rojas, “un simple indicador de los efectos de un problema más profundo”. Un problema que “se une a la línea de quiebra ya existente entre chiíes y suníes, que es la línea de quiebra dentro del propio mundo suní”.

La crisis diplomática entre Riad y Doha refleja un enfrentamiento derivado del “apoyo de Qatar, junto con Turquía, a los Hermanos Musulmanes”. Una crisis que ha estallado, según explicó el analista del IEEE, tras el cambio de Administración en Estados Unidos: “Barack Obama apoyaba a los Hermanos Musulmanes; pero los Estados Unidos de Donald Trump, no”.

Este panorama añade “aún más tensión” a un escenario en el que “las llamadas primaveras árabes, que afectaron principalmente a las antiguas repúblicas de corte militar”, han derivado en “estados debilitados por un terrorismo oportunista y guerras como la de Libia, el Sinaí egipcio, la de Yemen y la de Siria-Irak”. Todo esto ha traído consigo “una división por líneas sectarias y religiosas”.

Los últimos avances militares en relación con la lucha contra el autodenominado Estado Islámico, “con la toma de Mosul y la más que probable de Raqqa”, como recordó Sánchez Rojas, “anuncian una derrota militar del IS, algo que ya vaticinamos algunos hace tres años”. Sin embargo, el Analista del IEEE dejó en el aire una pregunta: “¿Se tratará de una derrota definitiva o volverán a emerger, como ya hicieran tras la retirada norteamericana de Irak?”.

En la respuesta a dicha pregunta tienen mucho que ver, según explicó Sánchez Rojas, “los conflictos internos que ahora mismo están afectando al mundo árabe” y, más en concreto, a esa región MENA. No sólo por implicar a “protagonistas directos”, sino por la ascendencia que “países como Qatar y Arabia Saudí tienen sobre potencias globales” como Estados Unidos, Rusia y China.